La emblemática construcción religiosa que preside la ciudad de Lleida ha sido el ganador de la primera edición del concurso televisivo "Batalla monumental", destinada a elegir el monumento favorito de los catalanes y catalanas, imponiéndose en la última votación con un 64% de los votos al otro finalista, el recinto modernista del Hospital de Sant Pau de Barcelona.

La Seu Vella de Lleida, declarada Bien Cultural de Interés Nacional y que figura entre los monumentos catalanes candidatos a ser declarados Patrimonio Mundial por parte de la UNESCO, es el principal atractivo turístico de la capital leridana y una de las mejores creaciones artísticas de la arquitectura catalana del siglo XIII, y por extensión de la arquitectura medieval europea. Su claustro, uno de los más grandes de la arquitectura gótica, es una de las joyas de la construcción.

La final de la “Batalla monumental” de TV3, emitida el pasado 28 de febrero desde el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), registró un total de 70.000 votos emitidos. Los doce monumentos que han participado en el programa son los restos arqueológicos de Empúries y de Tarraco, el castillo de Miravet y el castillo de Cardona, la iglesia de Sant Climent de Taüll y el monasterio de Sant Pere de Rodes, la Pedrera y el recinto modernista de Sant Pau, el monasterio de Santes Creus y el de Poblet, y la Seu Vella de Lleida y la catedral de Girona.

Un monumento singular

La denominada Seu Vella está formada por cuatro construcciones diferenciadas: el claustro, el templo, el campanario y la Canonja, donde hacían vida cotidiana los canónigos.

El claustro, de dimensiones considerables, tiene una situación atípica, a poniente de la iglesia, y su costado meridional se abre en galería sobre la ciudad; la construcción se hizo en aproximadamente 150 años y comenzó con las robustas formas del románico hasta llegar a la ligereza del gótico florido en el siglo XV (con un total de diecisiete arcadas, de las que solamente dos repiten la decoración de las tracerías).

El templo es una construcción románica de tres naves y un largo crucero, con una serie de capillas funerarias incorporadas en los siglos XIV y XV y que pertenecen a las principales familias nobles; destacan en él las puertas románicas, con su singular decoración, y muy especialmente la Puerta de los Ahijados.

El campanario tiene sesenta metros de altura y pertenece al tipo de campanarios octogonales que caracterizan el gótico catalán. La obra se comenzó en el siglo XIV y se finalizó en el XV. Está formada por dos cuerpos que tienen sendas escaleras de caracol, que después de 238 peldaños llevan al punto más alto de toda la ciudad y permiten disfrutar de un panorama extraordinario.

La Seu Vella está situada en la colina homónima, donde también encontramos el Castillo del Rey, erigido entre finales del siglo XII y el siglo XIV y popularmente conocido con el nombre de la Suda, y que fue el palacio donde residía el monarca durante sus estancias en Lleida; el recinto fortificado que rodea la colina con sus baluartes de defensa, paños de muralla, caminos de ronda y túneles, resultado de diferentes intervenciones llevadas a cabo en el contexto de los conflictos bélicos de época moderna y contemporánea, y otros elementos de interés como los antiguos pozos de hielo.

Hay que recordar que el Turó de la Seu Vella ya fue nombrado monumento favorito de los catalanes el año 2016 en el concurso organizado por las revistas Sàpiens y Descobrir Catalunya. El concurso, llevado a cabo entre 10 de los monumentos emblemáticos de Cataluña, contó con el apoyo de la Agencia Catalana del Patrimonio Cultural y de Catalunya Ràdio.

Más información:

Consorcio del Turó de la Seu Vella de Lleida

Tel. 973 23 06 53

Web: www.turoseuvella.cat