La capital del Pallars Jussà recupera este antiguo equipamiento, que antaño fue básico en la economía de la zona, así como el entorno de la Font Vella, creando de este modo un pequeño itinerario de interés natural y patrimonial
El pasado 1 de abril tuvo lugar la inauguración de las antiguas curtidurías de Tremp, un patrimonio industrial que muestra el paisaje productivo que durante muchos siglos fue básico en la economía de un gran número de familias de Tremp y Talarn. La actuación también ha incluido la recuperación del entorno de la Font Vella, espacio que tradicionalmente había sido un punto de socialización de los vecinos y vecinas de estos municipios.
El itinerario ahora habilitado, de 1.500 metros, comunica la zona de las curtidurías con los bajos del antiguo convento, actual albergue de juventud, atravesando las arcadas del puente románico de Sant Jaume siguiendo el barranco aguas abajo, hasta la carretera de Vilamitjana (C-1412b). El próximo día 5 se celebrará una nueva jornada de puertas abiertas a las curtidurías, mientras que el mencionado itinerario ya está abierto, permitiendo disfrutar de él ya esta Semana Santa.
Este proyecto ha permitido recuperar la curtiduría más grande, de titularidad municipal. En la planta baja se pueden admirar todavía las instalaciones en las que se llevaba a cabo la compleja técnica de la curtiduría tradicional, mientras que la primera planta se ha reconvertido en un nuevo espacio abierto a la ciudad. Este espacio conecta la ciudad con un tramo del redescubierto “camino real de montaña” y también con el camino que conduce hacia el río Noguera.
Los trabajos también han permitido estudiar e identificar otras actividades industriales que a lo largo de los tiempos se han llevado a cabo en torno al barranco de la Font Vella como un matadero, una destilería, un obrador de tinte y los 4 edificios que reunían las 8 curtidurías documentadas desde la edad media y que mantuvieron su actividad hasta finales del siglo XIX, y en los registros figura solamente una en 1925.
El barrio de las Adoberies de Tremp es fruto del incremento de las actividades manufactureras en los inicios de la edad moderna (finales del siglo XV) así como de la explotación por parte del convento de Sant Jaume de las aguas del río de Tremp. En este barrio se instalaron varios talleres que curtían pieles para su posterior aprovechamiento. Esta actividad industrial de Tremp, documentada ya en los siglos XVI y XVII, se convirtió en uno de los sectores económicos más importantes de la villa hasta su desaparición definitiva a mediados del siglo XIX.
La actuación ha sido posible gracias a la concertación del Ayuntamiento de Tremp con el Consejo Comarcal del Pallars Jussà. El presupuesto de la obra ha sido de 310.000 €, aportados por la Generalitat de Catalunya con fondos europeos FEDER (proyecto de “Valorización del Patrimonio Cultural y Natural para la dinamización turística del Pallars Jussà”), por la Diputación de Lleida y por el propio Ayuntamiento de Tremp.
Más información:
Consejo Comarcal del Pallars Jussà
Tel. 973 65 01 87
Web: https://www.pallarsjussa.cat/