El octubre proporciona al visitante una de las experiencias más sugestivas que ofrecen los campos leridanos: la vendimia, con los viñedos vestidos con los colores del otoño, y la posibilidad de visitar bodegas en pleno proceso de elaboración del vino
La demarcación de Lleida se está consolidando como una de las zonas vitivinícolas más prestigiosas de Cataluña, con vinos de gran calidad que se exportan a todos los continentes del mundo. Aunque los caldos se pueden degustar todo el año, el otoño es la mejor época para hacer una escapada enológica a las comarcas leridanas ya que al cromatismo de los viñedos de Ponent -una combinación de verdes pálidos, amarillos, dorados y rojos- se suma la posibilidad de observar el proceso de elaboración del vino en las diversas bodegas elaboradoras del territorio, además de disfrutar de las fiestas en torno al vino que se celebran en la demarcación.
Agrupados bajo el paraguas de la Denominación de Origen Costers del Segre, los vinos de Lleida conforman una oferta global con dos rasgos diferenciales: la calidad y la variedad. El territorio reúne 7 subzonas con sus propias características, con una treintena de variedades de uva blanca y tinta y unos viñedos que van de la plana de Lleida a los 900 o 1.000 metros de las fincas del Pirineo y el Prepirineo. Las subzonas que forman este mosaico geográfico (Artesa de Segre, Garrigues, Pallars, Raimat, Segrià, Urgell y Valls del Riucorb) abarcan 4.002 hectáreas de viña y tienen 36 bodegas inscritas, las cuales producen anualmente un promedio de 20 millones de kg y elaboran más de 250 referencias vinícolas.
La creación de la Ruta del Vino de Lleida hace patente la importancia que el enoturismo ha ido adquiriendo en las comarcas de Lleida. La iniciativa se configura como una asociación destinada a estructurar y promocionar una experiencia turística que invita a compaginar la visita a las bodegas y otras actividades de ocio y culturales con degustaciones gastronómicas en varios restaurantes de Lleida y pernoctaciones en alojamientos (hoteles y casas rurales) de la demarcación situados dentro de las distintas subzonas de la denominación. Actualmente dispone de una veintena de bodegas, además de una cincuentena de restaurantes, alojamientos, enotecas, empresas de productos de la tierra, empresas de dinamización enológica, centros culturales y oficinas de turismo.
Actividades en torno al vino
Este año la Ruta del Vino colabora con el Ayuntamiento de Lleida y la revista Cuina en la organización de las jornadas gastronómicas 'Cocina de la Huerta, vinos de Ponent', que tienen lugar del 29 de septiembre al 30 de noviembre con la participación de 11 establecimientos. Estos restaurantes ofrecen menús con productos de la Huerta maridados con vinos de 21 bodegas que forman parte de la Ruta del Vino.
Por otro lado, la Ruta del Vino, juntamente con la D.O. Costers del Segre, organizan el 9 de octubre un maridaje de vinos leridanos con turrón y chocolate en el marco de la Feria del Turrón de Agramunt.
Hay que decir que muchas bodegas ofrecen interesantes actividades complementarias, algunas de ellas muy destacables. Es el caso de la bodega de Raimat (el Segrià), que ha estrenado este verano Raimat Natura, el espacio natural visitable dentro de una finca vinícola más grande del Estado, que permite hacer paseos a pie, en bicicleta o en globo entre viñedos y lagos, además de ofrecer un pequeño local de restauración y degustación de vinos.
Por su parte, la Viña de los Artistas de la bodega Mas Blanch i Jové, situada en La Pobla de Cérvoles, ofrece al visitante una quincena de obras expuestas de forma permanente o temporal entre los viñedos y en la propia bodega, enmarcados en el pintoresco paisaje de las Garrigues.
Una buena vendimia
Tomàs Cusiné, presidente de la DO Costers del Segre, explica que la vendimia de este año -que en la demarcación de Lleida va de principios de agosto a mediados de noviembre, dependiendo de las zonas y variedades- será cualitativamente buena, aunque las lluvias de los últimos días pueden afectar algunas zonas. La vendimia será buena en cantidad de kilos recogidos, superior a la de 2020, año en que la producción bajó porque muchos viñedos se vieron afectados por la plaga del mildiu, y muy similar a la de 2019. Por su parte, los técnicos de la DO explican que la escasez de lluvias durante el verano ha rebajado algo las previsiones iniciales, pero destacan que, en cuanto a la calidad, se prevé "una añada memorable".
Más información:
Ruta del Vino de Lleida
Tel. 973 26 45 83
Web: https://www.rutadelvidelleida.cat/