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Los aficionados al turismo industrial y los amantes de los placeres termales están de enhorabuena. La Font Salada de Cambrils, en el municipio de Odèn, de la que brotan las aguas saladas más conocidas de la comarca del Solsonès, se ha reconvertido para ofrecer a los visitantes un nuevo atractivo turístico, unos baños terapéuticos para aligerar tensiones, dolores musculares y articulares. Y es que la singular concentración salina de las aguas del Salí, con 300 gramos de sal por litro de agua —muy parecida a la concentración del célebre Mar Muerto, considerado el lago más salino del mundo con 350 gramos de sal por litro— ofrece inmejorables calidades desintoxicantes y remineralizantes que benefician nuestra salud. Desde las vacaciones de Semana Santa, el Salí de Cambrils ofrece un complejo con una piscina de agua de 11 x 7 metros y 80 centímetros de profundidad donde los visitantes pueden disfrutar de los usos terapéuticos que provienen de la fuente de la Ribera Salada. El complejo, con una capacidad para 150 personas, cuenta también con un solárium, una zona de bienvenida, unos vestuarios, una tienda y otros servicios complementarios. Cabe decir también que este complejo forma parte del conjunto de los servicios culturales que ofrece el Salí de Cambrils, como por ejemplo rutas guiadas durante las cuales el visitante puede conocer a fondo el uso histórico de las salinas —una antigua explotación documentada ya en 1780— y su restauración. El recorrido incluye la visita a varios molinos y canales de agua y al mirador de Salí de Cambrils, así como la explicación sobre el proceso de fabricación natural de la sal. La actuación, que ha sido financiada en parte con fondos de la UE, es importante para el desarrollo económico y turístico de la comarca y a la vez constituye un valioso paso para conservar la historia, la cultura y la tradición genuinas de la zona. Más información:
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