Con la incorporación del nuevo espacio museizado del Café Salón, el conjunto de tiendas históricas de Salàs de Pallars (el Pallars Jussà) se consolida como una de las propuestas turísticas más singulares de la demarcación de Lleida y como uno de los centros de interpretación del comercio tradicional más importantes de Cataluña.

El Café Salón, adquirido por Sisco Farràs, impulsor de las tiendas-museo, para hacer un "centro de dinamización cultural y de actividades" relacionado en el antiguo comercio, alberga el Centro de Interpretación del Antiguo Comercio (CIAC) —anteriormente situado en las antiguas escuelas del pueblo— y una sala de exposiciones temporales, además de constituir el punto de encuentro y salida de las visitas a los comercios históricos.

Además del Café Salón, el itinerario guiado incluye un establecimiento de "ultramarinos y coloniales", una farmacia, un estanco, una mercería-perfumería, un quiosco, una barbería, un café y una imprenta, todos ellos situados en el centro histórico del pueblo. En todas las tiendas el visitante puede encontrar miles de objetos y productos fechados entre finales del siglo XIX y mediados del siglo XX. Las visitas se realizan en horario de mañana y tarde, con una mayor frecuencia durante el verano.

Cabe recordar que el CIAC estrenó el pasado mes de junio su web oficial, con información sobre la historia del proyecto, de las ocho tiendas de época ambientadas y de las actividades y exposiciones que tienen lugar en el centro.

Cada noviembre, la población pallaresa celebra el Día de Rememoración de la Feria de Salàs para recordar el que fue uno de los encuentros feriales más importantes de los Pirineos y de la Península, que reunía centenares de compradores y vendedores de ganado de pie redondo, mulas, especialmente, procedentes de España, Francia y Portugal. Después de seis siglos de existencia, la mecanización del campo sentenció este encuentro mercantil, cuya última edición fue en 1974.

La feria alcanzó su máximo esplendor en el siglo XVIII, cuando se construyeron las primeras eras porticadas destinadas específicamente a la feria (allí se acogía a los ganaderos y el ganado), y que todavía se pueden ver en la parte baja del pueblo. La importancia y duración de la muestra, ocho días, se mantuvieron durante todo el siglo XIX y principios del XX. En este periodo surgieron establecimientos como el Café Decano o el propio Café Salón, que llegaron a programar espectáculos con reconocidas vedettes del Paralelo barcelonés.

Más información:

Tiendas-Museo Salàs
Tel. 973 67 62 66
Web: www.botiguesmuseusalas.cat