Lleida avanza en su deseo de conseguir la proclamación del Turó de la Seu Vella, el elemento patrimonial capital, diferencial y más turístico de la ciudad, como Patrimonio Mundial de la UNESCO en la categoría de conjunto monumental.

El dossier definitivo que se ha confeccionado para presentar la candidatura del Turó de la Seu Vella a Patrimonio Mundial de la UNESCO, en la categoría de conjunto monumental, se entregó el 14 de enero a la consejera de Cultura de la Generalitat, Laura Borràs. A pesar de ello, el ministro de Cultura, José Guirao, confirmó el 29 de enero en una visita a Lleida que el Estado ya cuenta con candidatos confirmados hasta el año 2022. De este modo, la candidatura leridana no podrá presentarse ante la UNESCO en París al menos hasta 2023, siempre y cuando lo decida el organismo competente, el Consejo de Patrimonio Histórico.  

Cabe recordar que, con el Turó de la Seu Vella, las comarcas de Lleida aumentarían la lista del Patrimonio Mundial reconocido por la UNESCO, que actualmente consta del arte rupestre del arco mediterráneo de la península Ibérica, el conjunto románico de la Vall de Boí, la Fiesta de las Fallas del Pirineo y el arte de la construcción en piedra seca.

El documento, de casi mil páginas, se centra en la singularidad del Turó de la Seu Vella y de la Suda, un conjunto monumental que, como se detalla en el dossier, "ilustra de manera excepcional cómo a lo largo de más de dos milenios, desde el siglo V hasta hoy, coronando un reducido y complicado cerro, se han combinado civilizaciones, arquitecturas, estilos, funciones y usos, configurando un increíble conjunto monumental diverso, ecléctico, cohesionado, insegregable y único, en un lugar estratégico alejado de los grandes centros de poder peninsulares y europeos".

El dossier definitivo de la candidatura leridana reúne de forma extensa y detallada toda la argumentación histórica en la que se fundamenta la petición de que el Turó de la Seu Vella sea inscrito como bien cultural y conjunto monumental en el Patrimonio Mundial de la UNESCO. Una de las principales novedades que aporta el nuevo dossier es el cambio de estrategia para poner en valor todo el conjunto monumental del Turó de la Seu Vella, que ahora se centra en el reconocimiento de los monumentos o espacios que ofrezcan un ejemplo eminente de un tipo de construcción o de conjunto arquitectónico o tecnológico o de paisaje que ilustre un periodo o varios periodos significativos de la historia humana y que valora que el bien a reconocer esté directa o materialmente asociado a hechos o tradiciones vivas, creencias u obras artísticas o literarias que tengan una significación universal excepcional.

El documento señala los distintos elementos que constituyen la excepcionalidad, tanto por el extraordinario segmento histórico que ilustran, sin discontinuidades, como por su gran heterogeneidad tipológica, estilística, constructiva, arquitectónica y escultórica del conjunto monumental: castillo, catedral, iglesia, fortificaciones, pozos de hielo y restos arqueológicos. También subraya la singular inserción del claustro en el conjunto catedralicio, que es distinto a cualquier otro espacio similar en la península o en Europa. También pone en valor cómo el cerro ha acondicionado "radicalmente, a lo largo de toda la historia y en todas sus épocas, la morfología urbana de toda una ciudad".

Desde el punto de vista de los acontecimientos históricos que han tenido lugar allí, se destaca que el cerro ha acogido eventos determinantes para la configuración actual de Europa, "desde la más importante comunidad ibera del noreste peninsular, con los héroes Indíbil y Mandonio al frente, su papel decisivo en el desenlace de la campaña de Hispania de César, pasando por su protagonismo en la Edad Media o el papel estratégico que jugó en la Edad Moderna durante las guerras entre ejércitos europeos hasta los últimos episodios bélicos de la primera mitad del siglo XX, donde el Turó de la Seu Vella fue clave". El dossier señala asimismo que el Turó fue testigo de un largo periodo de creación intelectual y científica vinculada al Studium Generale, una de las primeras universidades europeas, por donde pasaron destacados personajes históricos como el papa Calixto III, Vicente Ferrer y Jaume Callís, consejero y abogado de los reyes Martín el Humano, Fernando I y Alfonso el Magnánimo, entre otros.

Más de 100.000 visitantes
El Turó de la Seu Vella atrajo a 100.006 visitantes durante el año 2018, un 17,13% más respecto a 2017 (en que la cifra fue de 85.377 personas). En mayo, mes lleno de actos festivos en Lleida, fue cuando se obtuvieron los mejores resultados, con 12.322 visitantes (a los que se podría añadir 2.398 usuarios). Actividades como “Posa’t la Gorra”, las visitas nocturnas al claustro coincidiendo con la luna llena o el concierto de Jordi Savall fueron las más multitudinarias.

La Diputación aportará 250.000 euros para la restauración de la muralla de la Seu Vella
La Diputación de Lleida y el Instituto de Estudios Ilerdenses (IEI) destinarán durante 2019 una partida de 250.000 euros para la restauración de la muralla norte de la Seu Vella. La aportación económica se hace después de que esta parte concreta del conjunto monumental del Turó de la Seu Vella sufriera el pasado mes de marzo un primer desprendimiento de piedras, y que a mediados de diciembre hubiera un segundo incidente, en este caso con otro desprendimiento de unos 10 metros cúbicos de piedras, tierra y raíces, que han dañado la zona y obligaron a cerrarla de forma provisional a la espera de futuras actuaciones de restauración.

La vicepresidenta primera de la institución y vicepresidenta del IEI, Rosa Pujol, destacó la satisfacción y el convencimiento de que el proceso para declarar el Turó de la Seu Vella conjunto monumental por la UNESCO avance a pasos agigantados, como lo está haciendo, y que el cerro es uno de los grandes iconos de Lleida, al igual que lo son las iglesias románicas de la Vall de Boí, las fallas o el arte de la piedra seca, todos ellos incluidos ya en la lista de patrimonio de la UNESCO.

Por todo ello, Rosa Pujol añadió que la implicación con la Seu Vella es absoluta, y una muestra de ello son los 250.000 euros que se destinarán a la restauración de la muralla norte, porque desde la Diputación se entiende que hay que preservar, por encima de todo, este patrimonio arquitectónico. Además, la Diputación de Lleida quiere formar parte del Consorcio del Turó de la Seu Vella de Lleida para impulsar la candidatura a Patrimonio Mundial.  

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